La guerra mormona de Misuri: Declaraciones Juradas de Thomas B. Marsh y Orson Hyde
Declaración jurada de Thomas B. March.
A petición de un comité de
ciudadanos del condado de Ray, hice la siguiente declaración en relación con
los recientes movimientos, planes e intenciones de los mormones en los condados
de Caldwell y Daviess:
Poco después de la solución de las dificultades en De Witt, en el condado de
Carroll, los mormones de Far West hicieron un llamado en el condado de Caldwell, para que los
voluntarios fueran al condado de Daviess para dispersar a la turba, según
dijeron. El día anterior a este, José Smith, el profeta, había dado una
predicación, en la que dijo, que todos
los mormones que se negaran a tomar las armas, si era necesario en dificultades
con los ciudadanos, debían ser fusilados o de otra manera ejecutados; y como yo
estaba allí con mi familia, me pareció muy prudente irme, y comencé a conducir
mi carreta. Marchamos a Adán-on-Diahmon y no encontramos tropas ni chusma en el
condado de Daviess. Con frecuencia, los grupos de exploración iban a cortar y
traían información que habían visto de trescientos a quinientos hombres.
Llegamos a Diahmon el martes por la noche, y al día siguiente una compañía de
unos ochenta mormones, comandada por un hombre llamado ficticiamente Capitán
Fearnaught, marchó a Gallatin. Regresaron y dijeron que habían huido de
Gallatin veinte o treinta hombres, y que habían capturado Gallatin, que habían
tomado un prisionero y que otro se había unido a la compañía. Más tarde supe
por los mormones que habían quemado Gallatin, y que lo había hecho la
mencionada compañía que marchaba allí. Los mormones me informaron que se habían
llevado todos los bienes de la tienda de Gallatin y los habían depositado en
los almacenes del obispo en Diahmon. El mismo día, Lyman Wight marchó con unos
ochenta jinetes hacia Mill Port. Regresó antes de la noche y llamó a José Smith
y a Hiram Smith para que les informaran (el dicho Hiram era consejero del
profeta José José) y dijo que Wight informó que había estado a la vista de Mill
Port, no había visto a nadie con quien pelear, pero que la gente en general se
había ido y dejado sus casas y propiedades. El profeta, al oír que la propiedad
quedaba, comenzó a responder y dijo: "Será mejor que nos ocupemos de
ello", cuando Wight lo detuvo diciendo "no importa, tendremos un
consejo privado", y Smith respondió "muy bien". El consejo privado
no lo escuché. Los hombres estaban decididos a ir a sus campamentos. Esa misma
noche, varios lacayos llegaron desde la dirección de Mill Port cargados de
bienes que, según me informaron, consistían en camas, relojes y otros muebles
domésticos. Esa misma noche creo que se despacharon unas tres carretas para
unas cuarenta gomas de abeja, y al día siguiente corté varias gomas, cuando las
estaban repartiendo y tomando la miel y la quema de las gomas, en cuyo negocio
de sacar la miel, solo pocos se ocupaban, porque nos temían, decían, serían
llamados como testigos contra ellos. Cuando Wight regresó de Mill Port e
informó a Smith que la gente se había ido y que la propiedad se la habían
llevado, Smith le preguntó si habían dejado a alguno de los negros para ellos,
y Wight respondió que no; A lo que alguien se echó a reír y le dijo a Smith:
"Entonces has perdido a tu negro". Al mismo tiempo, se envió una
compañía llamada la Compañía de Pieles para traer cerdos y ganado gordo,
llamando a los cerdos, osos y ganado búfalos. Trajeron en un momento siete
cabezas de ganado y en otro momento cuatro o cinco que pertenecían a la gente
de Daviess. Trajeron cerdos muertos, pero no sé cuántos, solo vi dos. Tienen
entre ellos una compañía que consiste en todos los que se consideran verdaderos
mormones, llamados los danitas, que han hecho un juramento de apoyar a los
líderes de la iglesia en todas las cosas que digan o hagan, ya sean correctas o
incorrectas; Sin embargo, muchos de los miembros de este grupo están muy
insatisfechos con este juramento, ya que va en contra de los principios morales
y religiosos. El sábado pasado, los mormones me informaron que tuvieron una
reunión en Far West, en la que nombraron a una compañía de doce, con el nombre
de la Compañía de Destrucción, con el propósito de quemar y destruir; y que si
la gente de Buncombe venía a hacer daño a la gente de Caldwell, y cometía
depredaciones contra los mormones, debían quemar Buncombe, y si la gente de
Clay y Ray hacía algún movimiento contra ellos, esta compañía destructora debía
quemar Liberty y Richmond. Esta quema debía hacerse en secreto, yendo como
incendiarios. En la misma reunión, me informaron, aprobaron un decreto por el
cual ningún disidente mormón debía salir vivo del condado de Caldwell; y que
los que intentaran hacerlo, fueran derribados, y enviados a contar su historia
en la eternidad. En una conversación entre el Dr. Avard y otros mormones, dicho
Avard propuso iniciar una peste entre los gentiles, como él los llamaba,
envenenando su maíz, fruta, etc., y diciendo que era obra del Señor; y dijo que
Avard abogaba por mentir para apoyar su religión, y dijo que no era malo mentir
para el Señor. El plan del profeta Smith, es apoderarse de este Estado, y él
profesa a su pueblo que tiene la intención de apoderarse de los Estados Unidos
y, en última instancia, del mundo entero. Esta es la creencia de la iglesia, y
mi propia opinión sobre los planes e intenciones del profeta. Es mi opinión que
ni el profeta José Smith, ni ninguno de los hombres principales, que es firme
en la fe, podrían ser acusados de ninguna ofensa en el condado de Caldwell. El
profeta inculca la noción, y todo mormón verdadero lo cree, de que las
profecías de Smith son superiores a la ley del país. He oído decir al profeta
que aún debe pisotear a sus enemigos y caminar sobre sus cadáveres; que si no
se le dejaba en paz, sería un segundo Mahoma para esta generación, y que
convertiría en una cornisa de sangre desde las Montañas Rocosas hasta el Océano
Atlántico; que así como Mahoma, cuyo lema, al tratar de la paz, era "el
Alcorán, o la Espada", así debería ser finalmente con nosotros, "José
Smith o la Espada". Estas últimas afirmaciones se realizaron durante el
último verano. El número de hombres armados en Adán sobre Diahmon era de entre
trescientos y cuatrocientos.
THOMAS B. MARCH.
Jurada y suscrita ante mí el día aquí escrito.
HENRY JACOBS, J. P. Condado de Ray Mo.
Richmond, Missouri, 24 de octubre de 1838.
Declaración jurada de Orson Hyde.
Sé que la mayoría de las afirmaciones de Thomas B. March en la divulgación anterior son ciertas, el resto creo que son ciertas.
ORSON HYDE.
Richmond, 24 de octubre de 1838.
Jurada y suscrita ante mí el día arriba escrito.
HENRY JACOBS, J. P.
El comité abajo firmante, por parte de los ciudadanos del condado de Ray, no
tiene ninguna duda, pero Thomas B. March y Orson Hyde, cuyos nombres están
firmados en los certificados anteriores, han sido miembros de la Iglesia
Mormona en plena comunión hasta muy recientemente, cuando abandonaron
voluntariamente la Iglesia Mormona y la fe, y que dicho March era en el momento
de su disidencia el presidente de los doce Apóstoles, y presidente de la Iglesia en Far West, y que
dicho Hyde era en ese momento uno de los doce Apóstoles, y que abandonaron la
Iglesia y abandonaron la fe de los mormones por la convicción de su inmoralidad
e impiedad. Thos. C.
Burch, George Woodward, C. R. Morehead, William Hudgins, J. R. Hendley, O. H.
Searcy, Henry Jacobs, Richmond, 24 de octubre de 1838.
__________
Messers, Williams y Rees al general Clark.
Demoss's, Medianoche. 25 de octubre de 1838.
General de División John B. Clark.
Le escribimos una carta apresurada desde este punto para darle información
auténtica en cuanto a la espantosa situación del condado en la vecindad de los
mormones. Nos dirigimos al Gobernador para comunicarle la siguiente
información: que estos miserables fanáticos se han despojado de todas las
restricciones y están destruyendo todo lo que tienen a su paso, han incendiado
Gallatin, la sede del condado de Daviess, han tomado las mercancías de la
tienda de J. Stollings y han quemado la casa, han quemado el pueblo de Mill
Port en Daviess, y han quemado casi
todas las casas desde Gallatin y Mill Port hacia el norte, así como en muchas
otras partes del condado, y saquearon todo el país de las propiedades de los
habitantes, ellos mismos dicen que se han llevado treinta mil dólares en
propiedades. En este momento hemos recibido un expreso informándonos que ellos,
esta mañana a la luz del día, atacaron a la compañía del capitán Bogart de
cincuenta hombres, con trescientos mormones, y lo derrotaron, matando a unos
diez hombres, hiriendo a muchos otros y tomando prisioneros a la mayoría de los
restantes. Muchos de los mormones murieron en la pelea, como se supone. Tenemos
pocas esperanzas de estos miserables desesperados, sino que matarán a todos
esos prisioneros. Este ataque se realizó en el condado de Ray. El capitán
Bogart había sido estacionado en la línea norte del condado para patrullarlo y
protegerlo, ya que los mormones habían amenazado con invadir ese condado. Han
decidido atacar e incendiar Richmond por la noche, y no nos cabe duda de que lo
intentarán. Las mujeres y los niños han abandonado Richmond y están abandonando
el condado, volando en busca de protección a Livingston y otros lugares. Estas
criaturas nunca se detendrán hasta que sean detenidas por la fuerte mano de la
fuerza, y hay que hacer algo, y eso rápidamente. No hay ningún tipo de duda
sino que toda la alarma, con mucho más que no nos ha dado tiempo a escribir es
cierta y se puede actuar en consecuencia.
Atentamente.
WILEY C. WILLIAMS, AMOS REES.
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